En su reflexión dominical, el papa Francisco nos lanza tres enseñanzas:
1.- No siempre es fácil creer
El papa nos dice que no es fácil creer, especialmente cuando tenemos problemas o cuando tenemos una decepción. Tomas tomo el riesgo de seguir a Jesús, puso su confianza en Dios, y su amigo muere en la cruz abandonado.
Muchas personas tomamos riesgos confiando en Dios, pero a veces fracasamos, nos sentimos abandonados. Entonces no es fácil volver a creer en Dios.
2.- No buscar a Dios en cosas extraordinarias
El pastor de la Iglesia Católica nos pide que no busquemos a Dios en hechos extraordinarios, en cosas raras, lejanas e incomprensibles.
Jesús está cerca, en la comunidad: Invita a no salir de la comunidad, al contario, compartir con ellos, rezar con ellos, partir con ellos el pan. Compartir con la comunidad sus límites y sus caídas, los momentos de oscuridad y miedo.
3.- Mirar y vivir de acuerdo a las señales del amor.
Las llagas de Jesús son señales del Amor que vence el odio; son señales del Perdón que desarma la venganza, son signos de la Vida que derrota la muerte.
Hoy nos pregunta si somos capaces de mirar las llagas de Jesús como signos de amor. Y luego abrir los brazos a quien está herido por la vida: Sin excluir a nadie de la misericordia de Dios.
